A mediados del s. XIX el uso de hierro forjado y cristal en la arquitectura estaba en su mejor momento. Con estos materiales, muy asequibles tras la revolución industrial, se construyeron edificios, puentes, invernaderos, etc.
También, maravillas como este fino y elegante balcón de 1868 en la Casa Velarde de Salas. Decorado con pequeños vidrios de colores, muy abierto y luminoso. Permite ver y ser visto.
Balcón en Casa Velarde, Salas. |