En las latitudes medias de la Tierra, como el Atlántico Norte, se generan áreas de baja presión atmosférica llamadas ciclones de latitud media a partir de las cuales, en determinadas condiciones y mayoritariamente durante el otoño e invierno, se producen descensos extraordinarios de la presión formándose las dañinas borrascas profundas europeas. Este fenómeno meteorológico que desencadena fuertes vientos, temporales duros marinos, lluvias y nieve, se traslada hasta el continente causando cuantiosos daños unas cinco veces cada año.
Del 25 al 29 de diciembre de 2020 el duro temporal marino generado por la borrasca profunda "Bella" azotó con fuerza los acantilados de Guadamia. El embate de las gigantescas olas sobre sus paredes calcáreas, conectadas con la red subterránea de galerías kársticas de la rasa costera, disparó con violencia y estruendo intimidante el agua a grandes alturas por los Bufones de Llames de Pría.
Un fenómeno natural que regala un grandioso espectáculo visual y sonoro con los embates de las olas, las efímeras columnas de agua pulverizada y los míticos bufidos del Cuélebre encerrado.
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| Acantilados de Guadamia y Bufones de Pría. Temporal Bella. |
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| Acantilados de Guadamia. Temporal Bella |
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| Acantilados de Guadamia y Bufones de Pría. Temporal Bella |
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| Bocana Playa de Guadamia. Temporal Bella. |
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| Acantilados de Guadamia. Temporal Bella. |
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